Nunca sé despedirme, porque soy un ciego que tantea por el túnel de tu mano y tus labios cuando dicen adiós, un ciego que tropieza con los malentendidos y con esas palabras que no saben pronunciar.
sábado, 10 de marzo de 2007
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17 comentarios:
"... y dices adiós
como quien dice quédate".
(Mario Benedetti).
tener que decir adiós cuando lo que uno quiere es quedarse, para siempre quizá, es de lo más difícil.
Por eso un hasta luego, o hasta pronto siempre deja una puerta a la esperanza, a la ilusión que tanto ayuda a vivir....
Adios Gwynette
(quiero decir, hasta la vista ;-)
Cuántas miradas más nos regalaran que tengan esa muda sentencia...
Un beso.
Lo mejor cuando uno no sabe despedirse es quedarse...
Un beso.
Lo bonito de las despedidas es cuando no son eternas. Un besote.
Adiós nunca, hasta luego, mejor. García Montero es uno de los míos, aunque él no lo sabe, pero no es necesario. Abracitos.
Qué tocada por tu post de hoy...
Besos, C
Todos somos ciegos cuando de decir adiós se trata.
No sabemos quien se queda y quien se va.
Lindo post, lindo.
Un abrazo.
Es lo que tenemos las alcachofas. El corazón sólo sale cuando te has enmarranao las manos.
Lo tuyo es fuerte, muy fuerte.
¿puedo volver?
Un beso.
"Au revoir" mejor que "Adieu".
Besos amiga
esta danzarina te invita al Blog Luso
http://lusoprosecontras.blogspot.com/
Hay veces que no se debe decir adios, y confiar en que será hasta pronto...
Adios suena demasiado definitivo, rotundo...
Un beso, Gwynette
Un ciego que no se quiere ir. Abrazos.
Buenas...
Qué arte tiene Montero, parece que sus palabras posen más que escribirse.
Si no conocéis la obra de Montero, os recomiendo Completamente viernes, entre otros, claro.
Saludos lunáticos
qué suerte tiene almudena grandes de que alguien le escriba estas cosas.
es precioso.
un abrazo.
Ahhh el lenguaje femenino a veces ;)
Un abracito
Reflex
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